Sobre mí

La maestra que te enseña
a leer tu mapa

Recorrer un camino como el del emprendimiento, convertirse en empresaria de la noche a la mañana y saber cómo gestionar toda esa nueva realidad, mientras haces malabares para encontrar el equilibrio y la conciliación en el resto de áreas de tu vida resulta agotador.

Con el tiempo, es posible que te sientas sola, aislada e incomprendida. Estés demasiado cargada con todo el ruido que hay fuera y no encuentres soluciones prácticas a tu medida.

Y no era eso lo que soñabas al emprender, ¿verdad?

Es hora de que cuentes con una mano tendida, la mía, para valorar tu visión y acompañarte en el proceso de hacerla realidad.

Tener un negocio ordenado, escalable y que crezca al ritmo que quieras, es posible para ti. Y por si fuera poco, creo que puedes lograrlo sin renunciar a tus valores, ni a tu pasión.

¿Preparada para dar el siguiente paso hacia tu negocio sostenible?

En Raquel Blanco Mentora, vas a encontrar ese extra que necesitas ahora mismo para conseguirlo. Aquí hablaremos de:

    • – Temáticas reales y prácticas del día a día de tu negocio.
    • – Números y rentabilidad para crear el equilibrio que buscas.
    • – Soluciones adaptadas a tu caso concreto, porque no creo en las “fórmulas mágicas”.

Hola, soy Raquel Blanco, tu maestra y guía de negocios y la mujer al frente de Raquel Blanco Mentora. 

Mi misión no es otra que allanarte el camino, para que consigas vivir tu visión al frente de un negocio sostenible y apasionado.

Verás, durante toda mi trayectoria profesional, me he dedicado a atender las necesidades de otros pequeños y medianos negocios, traduciendo el idioma legal al día a día de las empresas. Gracias a la experiencia, he desarrollado mi propia metodología, que es la que quiero compartir contigo aquí.

De hecho, este nuevo concepto surge de esa parte que más me gusta: ver nacer nuevos proyectos, poner en marcha buenas ideas y seguir su progreso, mientras las ayudo a crecer.

Lo que quizá aún no sabes de mí:

Soy adicta a los cursos

No sé parar de aprender, de reciclarme y si pudiera, le recomendaría lo mismo a todo el mundo (¡pero siempre con cabeza, claro!)

Me gusta llamar a las cosas por su nombre...

 por lo que no me asustan los números, ni llevar su control. De otro modo, creo que no es posible tomar buenas decisiones. Por eso, estoy dispuesta a ser la persona que te diga, ¡incluso lo que no quieres oír!

Me encanta mi trabajo...

…pero a veces me escapo para respirar, tomar aire y ¡volver cargada de nuevas ideas!

Suelo hacer visualizaciones...

…para planificar mi vida a cinco o diez años y he de confesar que se vienen muchos planes más en camino.